Aunque se escuchan voces de supervivientes entre los restos de avión
siniestrado, al menos un centenar de personas han fallecido en un
accidente en la mañana de este sábado de un Airbus A-321 al estrellarse en la península de Sinaí, según han confirmado fuentes oficiales.
El aparato, con 224 personas a bordo, entre ellos 17 niños y siete
tripulantes, despegó de la localidad egipcia Sharm el Sheij con destino
San Petersburgo a las 02.31 de la madrugada (hora española). Los radares
perdieron contacto con el aparato 23 minutos después de ...
abandonar
tierra. La mayoría de los pasajeros son de nacionalidad rusa. Se ha confirmado la muerte de cinco de los siete niños que viajaban en el avión.
“Hemos extraído al menos un centenar de cuerpos y el resto sigue en el interior del aparato, que está partido en dos:
una pequeña parte de cola y otra sección más grande que se ha
estrellado contra las rocas”, ha declarado una fuente oficial bajo el
anonimato a la agencia Europa Press.
“Existe otra sección del avión con pasajeros el interior, donde el
equipo de rescate está intentando entrar. Y esperamos encontrar
supervivientes, especialmente después de haber escuchado voces doloridas
en su interior”, han explicado estas mismas fuentes.
Por el momento, se desconocen las causas del suceso. No obstante, se
conoce que el piloto solicitó cambiar de ruta hacia El Cairo pocos
minutos después de despegar, posiblemente por problemas técnicos.
A este respecto, las autoridades egipcias han descartado que el Airbus haya sido derribado por alguno de los grupos armados que operan en la región, señalada como conflictiva.
Por su parte, el Gobierno de Rusia, con Vladimir Putin a la cabeza,
han mostrado sus condolencias a las víctimas y han lamentado este
suceso. Además, ya se han puesto en marcha los protocolos para ofrecer
asistencia inmediata a los familiares de los fallecidos.
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